domingo, 1 de marzo de 2015

El tiburón


"En marzo como marzadas; aire, frío y granizadas", pues bien, aquí estamos de nuevo para compartir de forma altruista y desinteresada un poco de conocimiento del saber. La vida en el mar puede llegar a ser un verdadero peligro, si nos encontramos con nuestro protagonista del enésimo capítulo del SDC: el tiburón.


Los selacimorfos, selachimorpha, selachos o condrictios son conocidos comúnmente con el nombre de tiburones o escualos. Algunos grandes tiburones como el blanco o el toro, entre otros, son conocidos a veces con el nombre de jaquetones. 


Se caracterizan por ser grandes depredadores. Los tiburones incluyen desde especies pequeñas de las profundidades marinas, hasta el tiburón ballena, el mayor de los peces, el cual se cree puede llegar a medir una longitud de 18 m y se alimenta únicamente de plancton. El tiburón sarda puede desplazarse a agua dulce y algunos ataques de tiburones han ocurrido en ríos.


De las más de 375 especies de tiburones encontradas en los océanos del mundo. Las especies responsables de la mayoría de los ataques no provocados a humanos son el tiburón blanco, el tiburón tigre y el tiburón sarda.


Los tiburones son condrictios o peces cartilaginosos es decir, su esqueleto está hecho de cartílago en vez de hueso. La piel de los tiburones está formada por una especie de escamas conocidas como dentíclos dérmicos. Otra función de esta piel es la de actuar como un silenciador, ya que el agua se distribuye hacia dentro de las hendiduras y no hacia afuera, limitando la fricción contra el agua, mejorando la movilidad y velocidad y, además, haciendo que el desplazamiento sea mucho más silencioso.


Aunque no tenga que ver con los tiburones, me gustaría hacerme eco de una iniciativa propuesta por un nadador amateur que va a intentar cruzar el estrecho de Gibraltar dentro de unos meses, aquí os dejo la referencia para que os informéis de primera mano de "el proyecto social Nuez" y recordad que sin ayuda no llegamos a ninguna parte...